La compañía Fashion Nova, promovida por decenas de influencers en redes sociales, debe millones a sus trabajadores.
La empresa Fahion Nova, que vende sus productos principalmente por Internet tiene como aliada a una amplia red de celebridades e influencers que publican sin cesar sobre la marca en las redes sociales, para satisfacer a la clientela que compra mucho por Internet ropa a bajo costo.
Los pantalones ajustados de Fashion Nova cuestan US$24.99, contra los US$200 los de otros fabricantes.
Pero este modelo oculta un «horrible» secreto: Las prendas se confeccionan en docenas de fábricas que debían US$3.8 millones en salarios atrasados a cientos de trabajadores, según documentos federales que resumen los hallazgos y fueron revisados por el diario The New York Times.
Los Ángeles está lleno de fábricas que pagan a los trabajadores fuera de los libros y lo menos posible, luchando contra competidores en el extranjero que pueden pagar aún menos. Muchas de las personas detrás de las máquinas de coser son indocumentadas y es poco probable que desafíen a sus jefes.
Esas fábricas, que son contratadas por intermediarios para producir prendas para marcas de moda, pagaron a sus trabajadores tan solo US$2.77 por hora, según una persona familiarizada con la investigación.
«Tiene todas las ventajas de un sistema de explotación», dijo David Weil, quien dirigió la división de salarios y horas del Departamento de Trabajo de los Estados Unidos de 2014 a 2017.
Después de que se descubrieron varias infracciones en las fábricas de Fashion Nova, algunos funcionarios federales se reunieron con los representantes de la empresa, para «garantizar» que todos los empleados relacionados con la marca Fashion Nova tengan una compensación adecuada por el trabajo que realizan.