La estrella de televisión ha abogado activamente por una reevaluación del actual sistema de justicia penal.
Kim Kardashian se reunirá con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, el miércoles, para discutir la reforma de la justicia penal acompañada de ex presos recién liberados.
La estrella de Keeping Up with the Kardashians ha abogado activamente por una reevaluación del actual sistema de justicia penal en los Estados Unidos, y trabajó notablemente para obtener una conmutación de pena para Alice Johnson, una bisabuela de 63 años que cumplía cadena perpetua por un delito de drogas menor.
Johnson asistirá a la reunión de la Casa Blanca junto a Kim, que ayudó a liberar también a los ex prisioneros Tynice Nichole Hall, Crystal Muñoz y Judith Negron.
La reunión se produce después de que Trump anunció una ola de conmutaciones y perdones el mes pasado, incluido el ex gobernador de Illinois Rod Blagojevich y el ex comisionado de policía de la ciudad de Nueva York, Bernard Kerik. También ha promocionado la Ley de Primer Paso, que tiene como objetivo mejorar los programas de rehabilitación para ex presos.
Kim dijo anteriormente que quiere que su trabajo legal marque una verdadera diferencia en el mundo, especialmente cuando cría a sus hijos varones, Saint, de cuatro años y nueve meses de edad, con su esposo Kanye West.
«Cuando te conviertes en madre, te vuelves tan protector», explicó en una entrevista en el programa matutino «Today», el año pasado.
“Con suerte, quieres hacer de su mundo el lugar más perfecto de todos. Y el nuestro obviamente no lo es. Y definitivamente veo cómo, especialmente, como los hombres negros, son tratados en este país, aún de manera diferente «.
La estrella de reality también será el tema de un próximo documental de Netflix titulado Kim Kardashian West: The Justice Project, que se estrenará en abril.