Lufti ha sido señalado como un manager que se aprovechó de la cantante cuando mas problemas de salud mental tenía.
Sam Lufti, exmanager de Britney Spears, usó su Twitter esta semana para disculparse con la cantante, diciendo que ‘falló’ cuando se suponía que debía protegerla.
Desde 2008, Lufti recibió una orden de restricción, que luego fue renovada, para no acercarse a la cantante, tras varias denuncias en su contra.
Anteriormente, los padres de Britney, Jamie y Lynne Spears, lo acusaron de tomar el «control» de su hija cuando ella estaba luchando con su salud mental en 2007.
Incluso afirmaron que Sam había «drogado» a Britney y cortado sus líneas telefónicas después de que él tomó «el control de su vida, su hogar y sus finanzas» cuando se mudó con ella.
Ahora el exmanager se disculpó por haber decepcionado a lalartista.
El mes pasado, Britney le dijo a un tribunal que sentía que la tutela era ‘abusiva’ y que ya no quería que otras personas controlaran sus negocios y su vida, y Sam reflexionó sobre su testimonio en Twitter el miércoles por la mañana, diciendo:
«Solo sentado aquí escuchando la grabación de la sala del tribunal… si ella me odia después de que la liberen, no la culpo. Le fallé. Debí protegerla de todo esto, la decepcioné y los dos pagamos caro por ello, lo siento», señaló.
En otra audiencia el miércoles, Britney recibió permiso para tener a Mathew Rosengart como su nuevo abogado y él debe presentar documentos en la corte solicitando que su padre Jamie Spears sea destituido de su cargo como co-tutor de sus asuntos.
Y Sam tiene la esperanza de que se puedan hacer grandes avances ahora: «Este es un mensaje de celebración temprano, pero por ahora hay un nuevo sheriff en la ciudad y las cabezas están a punto de rodar. Es un viaje tremendo que aún no ha comenzado. Dios bendiga a todo el ejército. Los amo a todos», escribió.