Tocados africanos: Historia, resistencia y empoderamiento cultural

Graca Assane / Unsplash
Graca Assane / Unsplash

Una tradición que ha recorrido generaciones, enriquecida con simbolismos…

En el vasto y diverso continente africano, el uso de tocados femeninos es una tradición que ha recorrido generaciones, enriquecida con simbolismos que van desde el estado civil hasta la pertenencia étnica o el rango social. Aunque este singular accesorio ha recibido distintos nombres según la región —doek, gele, duku—, su presencia ha sido constante a lo largo de los siglos, y hoy en día es un emblema de orgullo y conexión con las raíces culturales.

Tras haberse adaptado y evolucionado a lo largo de la historia, el tocado o turbante africano está viviendo un renacimiento en tiempos modernos, potenciado por el poder de las redes sociales y nuevas tendencias globales que celebran la identidad.

Un símbolo de estatus en las primeras comunidades africanas

Los tocados comenzaron a cobrar significado en África subsahariana durante el siglo XVIII, en comunidades donde cada diseño y color comunicaba un mensaje específico. En esa época, las mujeres de diferentes comunidades usaban estilos de tocados únicos que reflejaban su estatus, posición social o situación familiar. En la antigua cultura egipcia, por ejemplo, se ha documentado que las reinas llevaban tocados elaborados que simbolizaban poder y nobleza. En otras partes del continente, el estilo del tocado de una mujer podía indicar si estaba casada, soltera o comprometida, dotando a esta prenda de un valor cultural y personal.

De África a América: Transformación y resistencia

En el mismo siglo XVIII, las mujeres africanas que fueron forzadas a la esclavitud en América llevaron consigo esta tradición, pero en el nuevo continente el significado del tocado fue distorsionado. Los tocados comenzaron a ser utilizados como un recordatorio de subordinación y, en algunos casos, las mujeres esclavizadas estaban obligadas a cubrirse la cabeza como muestra de su estatus. En muchas regiones, las leyes coloniales dictaban que las mujeres negras no podían salir en público sin un tocado que las diferenciara de las demás, mientras que en otros lugares su uso estaba prohibido en un intento de borrar cualquier símbolo cultural africano visible.

Aunque la esclavitud fue abolida en 1865, las generaciones posteriores aún percibían los tocados con una carga simbólica negativa, lo que llevó a muchas mujeres afrodescendientes a dejar de usarlos durante un tiempo para desvincularse de su asociación con la opresión. La moda occidental también influyó en esta decisión, y muchas mujeres comenzaron a adoptar estilos más cercanos a la cultura dominante en busca de integración social.

El renacimiento en la era digital

A pesar de estos obstáculos, el tocado africano comenzó a reaparecer como una prenda funcional para la protección contra el sol y el cuidado del cabello y, en los últimos años, el uso de tocados ha renacido con una gran carga cultural, ganando popularidad como símbolo de orgullo y resistencia cultural, impulsado en gran medida por el poder de las redes sociales.

Este renacer cultural de los tocados africanos se ha intensificado en los últimos años, impulsado por la difusión masiva en redes sociales como Instagram y TikTok, donde miles de tutoriales y opciones de estilo inspiran a personas de todas las edades. Las plataformas digitales, al igual que otras tendencias tecnológicas como los cripto casinos, han mostrado el poder de una comunidad global unida por sus intereses y, a través de estos medios, el tocado se ha vuelto no solo un símbolo de herencia, sino también una expresión creativa abierta a todo el que quiera incorporarlo en su estilo personal.

Y es que la popularidad actual de los tocados africanos se debe en gran medida a la influencia de celebridades e influencers, quienes han usado sus plataformas para mostrar sus propios estilos y celebrar la belleza de esta prenda con profundo arraigo cultural. Desde estampados tradicionales hasta diseños contemporáneos, estas figuras públicas han reivindicado el uso del tocado, impulsando una visión más amplia en la que también se le reconoce como un accesorio de moda, sin perder su carga simbólica. Esto ha permitido que el tocado se aleje de sus connotaciones negativas del pasado, siendo reinterpretado como un símbolo de orgullo cultural.

Más que una moda

Para muchas mujeres africanas y afroamericanas, llevar un tocado no es solo una elección de estilo; es una forma de rendir homenaje a sus antepasados y a su historia. En cada pliegue y cada color, el tocado narra la resistencia y fortaleza de quienes, a lo largo de los siglos, mantuvieron viva la cultura africana frente a grandes adversidades. Así, el uso de tocados se convierte en una declaración de identidad, conectando a las nuevas generaciones con su legado y recordando que, a través de los siglos, este accesorio ha sido testigo de momentos de gloria, dolor y resistencia.