Emma Bunton estaba muy triste al mudarse a vivir con las Spice Girls

Emma Bunton

La cantante tenía en aquel entonces solo 19 años, y nunca había vivido fuera de casa…

Emma Bunton recordó esta semana que estaba muy triste cuando se mudó a vivir con las Spice Girls, al comienzo del grupo, cuando tenía sólo 19 años, en la década de 1990.

La estrella del pop, ahora de 44 años, dijo que cuando se unió al grupo tuvo que mudarse con sus compañeras de banda Victoria Beckham, Geri Horner, Mel B y Mel C a una casa compartida. Era la primera vez que dejaba a su casa y a su familia, por lo que fue una experiencia difícil para ella.

Pero Emma dijo que rápidamente se dio cuenta de que todas serían buenas amigas si pudiesen ser «abiertas» unas con las otras. Cuando Bunton les confesó que extrañaba su casa todas las chicas se apresuraron a consolarla.

Ella recordó: “La primera noche que llegué allí [a la casa], lo compartí con Victoria… estaba acostada en la cama y estaba realmente triste porque era mi primera noche fuera de casa. Pensé: ‘O me acuesto aquí y lloro sola, o voy a hablar con las chicas’. Así que me levanté y dije: ‘Chicas, esta es la primera vez que estoy fuera de casa y siento que va a ser especial, pero esta es la primera vez que estoy lejos de mi casa, me siento muy triste y extraño a mi mamá y No sé qué hacer’. Todas me abrazaron y supe que sería así. Sabía que tenía que ser abierta con ellas si iba a ser una amistad duradera”, señaló, durante su participación en el podcast de Clemmie Telford.

Emma, que tiene dos hijos, Beau, de 13 años, y Tate, de nueve, con su pareja Jade Jones, dice que está agradecida de haber encontrado la fama en la década de 1990 y no ahora en la era digital, porque no le gustaría que su vida personal estuviese todo el tiempo en exhibición.

«Solo tenía 19 años cuando [la banda] comenzó y no sé cómo habría manejado las redes sociales y las imágenes en ese momento. Recuerdo la primera vez que estaba con amigos en un club y vi a alguien con un teléfono con cámara y me tomaron una foto y pensé ‘oh Dios mío, así es esto ahora, la privacidad se acabó y no hay límites’. Eso me asustó. En el mundo de las celebridades, claro que te expones, pero hay esos momentos en los que te gustaría de tener tiempo con tus amigos y no tener a nadie entrometido, pero eso terminó en ese momento», considera.