«Dancing with Diana»: La tormentosa relación de la Princesa Diana con el Rey Charles

Princesa Diana de Gales

Las memorias de su profesora de ballet revelan el profundo dolor y la soledad que sentía la princesa de Gales…

Las nuevas memorias de Anne Allan, «Dancing with Diana», revelan un lado íntimo y desgarrador de la vida de la princesa de Gales. A través de sus clases de ballet, Diana compartió con Allan sus más profundos sentimientos de soledad, dolor y traición.

La princesa confesó a su profesora que su matrimonio con el entonces Príncipe Charles era una fuente constante de sufrimiento. «No hay afecto entre nosotros y siempre estoy sola», le dijo Diana a Allan. «No entiendo por qué no soy suficiente para él; creo que prefiere una mujer mayor… Sé que está saliendo con Camilla de nuevo».

Las infidelidades de Charles con Camilla Parker-Bowles eran una herida abierta para Diana. La princesa sentía que no recibía el apoyo de la familia real y que era juzgada constantemente. El baile se convirtió en su refugio, un espacio donde podía expresarse libremente y encontrar un poco de paz.

En 1987, Diana quedó desolada por la muerte de su guardaespaldas, y supuesto amante, Barry Mannakee en un accidente de motocicleta. Diana describiría más tarde a Mannakee como su «gran amor» en cintas grabadas por su entrenador de voz, Peter Settelen.

Poco después de la muerte de Mannakee, Diana le dijo a Allen que Charles quería vivir vidas separadas, admitiendo: «Todo lo que quiero es estar con Charles y ser amada por él… él se escapa con Camilla cada vez que puede. […] ¿Debería aguantarlo y esperar que cambie?».

Además, de acuerdo con Allan, la Princesa reveló que le daba vergüenza admitir que sufría de bulimia, trastorno alimenticio que empeoró por sus diversos problemas maritales con Charles.

El fin de una amistad

La última vez que las amigas se hablaron fue después de la muerte del padre de Diana, Earl Spencer, en marzo de 1992, el mismo año en que ella y Charles se separaron oficialmente.

Tras el shock de la muerte de la Princesa Diana en Agosto de 1997, a Anne Allan solo le quedó recordar a su amiga, sintiéndose honrada de haber sido parte de su historia.