A la presentadora Adrienne Banfield-Norris no le gustó recibir a la influencer en su programa Red Table Talk…
Olivia Jade Giannulli, hija de la actriz Lori Loughlin y el diseñador de moda Mossimo Giannulli, quienes se encuentran en prisión luego de ser declarados culpables de su participación en el fraude de admisión de la Universidad del Sur de California, participó en el programa Red Table Talk, de Facebook Watch, presentado por la esposa de Will Smith, Jada Pink-Smith, su madre Adrienne Banfield-Norris y su hija Willow Smith, precisamente para hablar por primera vez del controvertido tema, aceptando que sus padres, ‘queriendo ayudarla a ella y también a su hermana, pagaron US$ 500 mil para que fueron admitidas en la USC.
Pero la conversación empezó tensa, porque a Adrienne no le pareció darle espacio a la influencer de belleza de 21 años en el programa, sin mencionar el privilegio blanco que tiene, no solo porque es blanca, sino porque es rica e hija de famosos.
La presentadora Jada Pinkett Smith reveló al comienzo del episodio que Olivia la había llamado porque quería ‘venir a nuestra mesa’. La actriz agregó que ella, su madre Banfield-Norris y su hija, Willow, tenían sentimientos ‘muy diferentes’ sobre la participación de Jade en el programa de entrevistas.
La suegra de Will Smith, de 67 años, admitió: «Luché con uñas y dientes. Me pareció realmente irónico que ella eligiera a tres mujeres negras para contar su historia de redención. Siento que aquí estamos, [una] mujer blanca que viene a mujeres negras buscando apoyo cuando nosotras no recibimos lo mismo de ellas ”, criticó. «El hecho de que ella esté aquí es el epítome del privilegio blanco para mí».
Pinkett Smith respondió a su madre: «Te entiendo, pero déjame ser clara, nunca quiero hacer lo que las mujeres blancas hicieron por mí».
Cuando Olivia llegó a la mesa, el grupo comenzó a discutir los arrestos de sus padres y el tiempo que pasarían en prisión. Pero Norris todavía estaba irritada por la situación.
«Déjame preguntarte si tienes una idea clara ahora de cuál es realmente el privilegio blanco», cuestionó Banfield-Norris a Olivia, quien contestó que sí y agregó que antes del incidente consideraba que su vida estaba ‘garantizada’.
«Fue un gran cambio en mi cabeza… ‘OK, comencemos a reconocer dónde están los errores en eso'», comentó la influencer.
Banfield-Norris preguntó: «¿Entiendes por qué diferentes personas de la comunidad estarían disgustadas? ¿Entiendes por qué me disgustó que estuvieras aquí y lo que hicieron y el daño que causaron?», cuestionó.
«También me encantaría saber de usted. Siento que es una buena experiencia de aprendizaje», dijo Olivia. «Teníamos los medios para hacer algo y lo hicimos. Realmente es algo que no se puede excusar, en el papel es malo», agregó, diciendo que sabía de la participación de sus padres en el escándalo porque querían ayudarla a ella y a su hermana, Isabella Rose, de 22 años.
«Creo que pensaron que eso era normal», comentó. “No vine aquí para tratar de conquistar a la gente. Solo quiero disculparme por haber contribuido a esta desigualdad social, aunque no me di cuenta en ese momento… poder venir aquí y reconocer que soy consciente de ello”, justifica.
Banfield-Norris discutió el efecto del escándalo en la comunidad negra y le dijo a Olivia: «Creo que, para mí, es… ya hay tanta deshumanización violenta por la que la comunidad negra tiene que pasar a diario. Hay tanta devastación, particularmente en este año de 2020, con la pandemia y todo lo demás que trajo a colación , cómo hay tanta desigualdad e injusticia, que cuando te acercas a la mesa con algo así, es como, ‘Niña, por favor’ «.
Y la madre de Jada no se calló y continuó: «Estoy exhausta. Estoy exhausta con todo lo que tenemos que enfrentar como comunidad y simplemente no tengo la energía para poner en el hecho de que has perdido tu apoyo o no estás en la escuela ahora. Porque al final del día estarás bien. Porque tus padres van a salir de prisión después de cumplir esos 60 días y van a pagar la multa… van a seguir adelante y van a estar bien y vas a vivir tu vida”, señaló.
Ella agregó: «Dentro de un año, puede que me sienta diferente, pero ahora, en la atmósfera en la que se encuentra el mundo, es muy difícil para mí sentir compasión por ti. Y no debería decir ‘sobre ti’ porque no quiero que lo tomes para el lado personal. No se trata realmente de ti, pero por eso estoy feliz, porque lo que escucho de ti es que hay un interés y un deseo de aprender y descubrir dónde encajas en el mundo y cuál es tu función en marcar la diferencia», concluyó Banfield-Norris su lección de moral a la influencer.