Al personal que trabajaba en la planta donde se hacían los cosméticos, no se les permitía interactuar con la estrella.
Al personal de la fábrica que producía el maquillaje de Kylie Jenner no se le permitía interactuar con ella y mucho menos siquiera mirarla.
Esta revelación fue hecha por una ex empleada que trabajaba para Spatz Laboratories, donde se producían los codiciados cosméticos de la magnate del maquillaje.
En declaraciones a The Sun, Irene Lopaz dijo que cuando Kylie visitaba la fábrica, con su madre Kris Jenner, se advertía a los empleados de antemano que no interactuaran con ella en absoluto.
«Antes de que llegaran, nuestros supervisores nos decían: ‘No se les permite hablar con ellos, se supone que deben seguir trabajando, no se les permite tomar fotografías ni hacer preguntas».
Agregó que la estrella de Keeping Up With the Kardashians nunca hablaría con los empleados y solo vería cómo se producía su maquillaje ante sus ojos.
Añadió que los supervisores y el entorno laboral en general eran muy tóxicos.
«Los supervisores que tenía allí habían sido muy degradantes con todo el mundo. Todo tenía que estar perfectamente hecho y si no, te lo tiraban en la cara como si fuera basura. Si no ibas lo suficientemente rápido, eras despedida», dijo la mujer.