La mansión de los Sussex está ubicada en un terreno que alguna vez perteneció a la tribu Chumash, y usan su «agua sagrada».
Los ‘problemas’ no dejan de surgir para los duques de Sussex, Meghan Markle y el príncipe Harry. Ahora ellos son señalados en una nueva acusación, según ha reportado el diario inglés The Sun.
La publicación reveló que la pareja está siendo ‘acusada’ de estar usando el agua sagrada de una tribu de indios americanos, los Chumash.
Resulta que la mansión de los duques de Sussex está ubicada en un terreno que alguna vez perteneció a esa tribu, y ahora temen que Meghan y Harry estén usando agua que consideran sagrada, para regar su enorme jardín.
La líder de Chumash, Eleanor Fishburn, explicó que esta agua se considera pura y se usa en ritos ceremoniales, y le preocupa que estén dando un mal uso a esa riqueza natural, que viene de los acuíferos subterráneos y fuentes termales del lugar.
“Como población nativa, es sagrado para nosotros y la idea de que la gente de la región esté usando agua de manantial para el riego no nos hace felices”, agregó Eleanor, quien está dispuesta a unirse con los exmiembros de la realeza para platicar sobre el asunto.