Por su seguridad la familia real se podría disponer para recibirlos nuevamente bajo su cobijo.
Parece que Meghan Markle y Harry no la está pasando tan bien como esperaban, y la invasión a su privacidad en Canadá por parte de la prensa los ha puesto nerviosos.
Los ex duques de Sussex no contaban que ya sin la seguridad a la que tenían derecho por ser miembros de la realeza, los hace muy vulnerables, incluso los pone en riesgo, pues son presa del asecho de paparazzi y cualquier reportero que quiera acercarse a su vivienda para ver cómo viven.
Tanta es la preocupación que en el palacio de Buckingham ya se tienen planes organizados por el inminente regreso de Meghan, Harry y Archie al seno de la familia real británica.
También los ciudadanos canadienses no están muy de acuerdo con asumir los gastos de la seguridad de la pequeña familia, así que no es lejano asumir que en cualquier momento podrían retornar a los brazos de Elizabeth II en Londres.