Los duques de Sussex no estaban dispuestos a enseñar su vida íntima…
A punto de estrenar su primer documental en Netflix, ahora se revelan algunos conflictos sobre la construcción de esa serie, según el diario «The New York Post». Afirman que al inicio del proyecto, el príncipe Harry y Meghan Markle tuvieron una discusión con la directora del documental, Garrett Bradley, luego de supuestamente no estar de acuerdo con una sugerencia de la cineasta.
Los duques de Sussex decidieron despedirla por no compartir la misma visión del proyecto, y ahora están trabajando con la directora y cineasta Liz Garbus:
«Garrett quería que Harry y Meghan filmaran en casa y ellos no se sentían cómodos haciéndolo. Hubo algunos momentos incómodos entre ellos y Garrett abandonó el proyecto. La propia productora de Harry y Meghan capturó la mayor cantidad de imágenes posible antes que Liz Garbus fuese contratada.
La publicación revela que no todo ha sido fácil para los jefes de Netflix y Garbus, quienes también se enfrentaron con el duque y la duquesa de Sussex por el contenido de la serie luego de que la pareja quisiera realizar ediciones importantes tras la muerte de la reina Elizabeth II en septiembre pasado.
A pesar de todos los esfuerzos de Harry y su equipo para retrasar el documental hasta 2023, el programa se emitirá a principios de diciembre por Netflix.