El cantante de 78 años asegura que tiene testigos de las amenazas de su nieta antes de acusarlo de tocamientos uando era niña.
Enrique Guzmán dice tener pruebas y testigos de que su nieta, Frida Sofía, lo amenazó poco antes de revelar que el músico de 78 años la había manoseado cuando era una niña de cinco años.
El cantante exige que Frida Sofia muestre pruebas de sus acusaciones, y deja claro que se «defenderá» de las acusaciones que hizo contra él su nieta.
«No sé si es que están preparando una defensa extraordinaria, o es que no tienen con qué probar que yo a esa niña de 5 años la mal toqué; no tienen con qué proceder, pero ahora yo presentó la demanda contra ellos».
«Tendría que haber alguien que hubiera visto que la hubiera tocado, no tiene testigos porque no pasó nada. Nadie ha visto nunca que yo me comporte de esa manera con ella».
El cantante insiste que las autoridades deben someter a Frida Sofia a exámenes mentales.
“Quiero que la niña venga, y que ante las autoridades médicas legales se le haga un examen, porque si está inventando el chisme, es porque se siente mal o porque algo no le da vueltas bien en el engrane, o algo que no procesa, que no sé qué es, pero lo voy a comprobar”.
Don Enrique insiste en que recibió amenazas de su nieta, y que tiene testigos de ello: “Estaba yo sentado en esta mesa donde desayunamos, estaba mi hija y mi otro hijo, mi mujer estaba en la cocina y recibí una llamada de ella (Frida), me dijo ‘Yo voy a hundir a Alejandra Guzmán y a ti también’ y colgó”.
«Oyeron los cuatro lo que me dijo por teléfono y esos sí son testigos que tengo que presentar, porque es cierto», señaló.