Los actores se encotraron en un estudio de grabación donde trabajaba su hija, y Soto se escapó sin hablar con la prensa.
Aunque Gabriel Soto y Geraldine Bazán ya llevan tiempo divorciados, y no fue en buenos términos, han intentado llevar una relación cordial por el bien de sus hijas.
Pero el destino los volvió a poner frente a frente, y fue precisamente por sus niñas, que Soto y Bazán se reencontraron y se volvieron a ver las caras.
Los dos acudieron por separado a ver a una de sus hijas, Elissa Marie, participar en las grabaciones de una telenovela, y frente a vaios reporteros quedaron frente a frente.
El actor despreció a los medios y no se detuvo a atenderlos cuando le pidieron que les regalara un minuto, mientras que Geraldine sí lo hizo, sorprendiéndo a todos porque no despotricó en contra de la prensa a la que ha acusado de acoso.
La actriz contestó gentilmente las preguntas, pero cuando le preguntaron sobre su ex marido ella evadió diciendo «gracias, gracias, los quiero mucho…»
No se sabe si la ex pareja intercambió palabras durante su breve encuentro.