La viuda de actor, Susan Schneider, quien fue la heredera directa de la propiedad, decidió hacer una rebaja al precio de salida.
La mansión que perteneció a Robin Williams no ha encontrado comprador desde que se puso a la venta a fines del 2019, por lo que su viuda Susan Schneider, quien fue la heredera directa de la propiedad, decidió hacer una rebaja al precio de salida.
La bella casa está ubicada en una exclusiva zona que tiene una privilegiada vista de la bahía de San Francisco. Consta de poco más de 6 mil 500 pies de extensión, piscina, 6 recámaras, 6 y medio baños, biblioteca, sala principal, sala de estar, una bella terraza, además de otras habitaciones.
El precio inicial de venta fue de US$7.25 millones de dólares, pero se hizo una rebaja de US$1.255 millones, para quedar en US$5.995 millones. El actor adquirió esa casa en 2008, por la que pagó 4 millones de dólares.