El duque de Sussex y su esposa pasan el tiempo en familia con su hijo de 11 meses, y se unen a organizaciones benéficas.
El príncipe Harry está aprovechando el tiempo precioso con su hijo Archie durante la cuarentena del coronavirus.
El duque de Sussex comparte a su hijo de 11 meses con su esposa, la ex actriz Meghan, y se cree que la familia está pasando su aislamiento en Los Ángeles.
Harry habló sobre cómo están lidiando con esa situación, durante una reunión virtual con los padres y cuidadores de la organización benéfica WellChild, durante el fin de semana de Pascua, sonriendo dijo: “Hay muchas cosas positivas que están sucediendo al mismo tiempo, y poder tener tiempo en familia, tanto tiempo en familia, que casi piensas: «¿Me siento culpable por tener tanto tiempo en familia?» Tienes que celebrar esos momentos en los que estás simplemente rodando en el piso, histérico».
«Inevitablemente, media hora más tarde, tal vez un día después, habrá algo con lo que tendrás que lidiar y no hay forma de que puedas escapar de eso».
Añadió: «Por supuesto, existe el miedo a lo que podría suceder, pero hay muchas cosas que están fuera de nuestro control y, de repente, nos hemos dado cuenta de lo pequeños que somos en el gran esquema de las cosas».
La pareja está haciendo todo lo posible para ayudar donde puedan durante la pandemia, y se unió a la organización Project Angel Food para entregar comidas a 20 personas que viven con enfermedades críticas en West Hollywood, California, el miércoles.
Era la segunda vez que Harry y Meghan se ofrecían como voluntarios, ya que habían entregado comidas el domingo de Pascua, y Richard Ayoub, director ejecutivo de Project Angel Food, dijo a Entertainment Tonight: “Nos dijeron que escucharon que nuestros conductores estaban sobrecargados y querían ser voluntarios para aligerar su carga de trabajo».