La cantante sufrió espasmos en el ojo derecho mientras estaba en el escenario…
Katy Perry viralizó esta semana debido a un posible problema de salud que presentó en medio a su concierto, cuando su ojo derecho empezó a parpadear sin que ella tuviese control sobre él.
La cantante ya había externado que padece algo conocido como ‘ojo torcido’ o ‘wonk eye’, que en términos médicos se denomina blefaroespasmo.
De acuerdo con el instituto nacional de los ojos, en Estados Unidos, el blefaroespasmo es el parpadeo u otros movimientos del párpado, como contracciones o espasmos, que no se puede controlar.
Cuando empezó a tener esos espasmos, Perry ayudó con las manos, a cerrar sus ojos.
Según especialistas médicos, las causas pueden ser debido a fatiga, estrés o consumo excesivo de alcohol.