Críticos de la elección alegan que una mujer de origen africano o árabe debería ser la elegida para el papel.
Gal Gadot quiere «celebrar el legado de Cleopatra» en su próxima película, el drama biográfico Cleopatra, que estará lista para el 2022. La actriz de 35 años se reunirá nuevamente con su directora de ‘Mujer Maravilla’, Patty Jenkins, para interpretar a la última gobernante del antiguo Egipto en la pantalla grande.
Pero la elección de Gadot como Cleopatra (69 a. C. – 30 a. C.) provocó una reacción violenta, porque la gente argumentó que se debería elegir a una actriz árabe o africana para el papel icónico y no la actriz israelí.
Gal Gadot respondió a las críticas y afirmó que Cleopatra, cuya raza ha sido objeto de debate entre los historiadores, era en realidad macedonia.
Ella le dijo a la BBC en árabe: “Primero, si quieres ser fiel a los hechos, entonces Cleopatra era macedonia. Buscábamos una actriz macedonia que encajara con Cleopatra. Ella no se presentó. Y yo siempre fuí muy enamorada de Cleopatra (…) Tengo amigos de todo el mundo, ya sean musulmanes, cristianos, católicos, ateos, budistas o judíos, claro… Las personas son personas. Y conmigo, quiero celebrar el legado de Cleopatra y honrar este increíble ícono histórico que tanto admiro.», justificó.
Recientemente, Gal Gadot ha compartido su emoción al interpretar a la llamada ‘reina del Egipto’, escribiendo en Twitter:
«Me encanta embarcarme en nuevos viajes, me encanta la emoción de los nuevos proyectos, la emoción de dar vida a nuevas historias. Cleopatra es una historia que quería contar desde hace mucho tiempo. ¡¡No puedo estar más agradecida por eso !!», señaló.
La cinta de Paramount Pictures se basa en un guión escrito por Laeta Kalogridis y el estudio ganó la película después de una guerra de ofertas con Warner Bros., Apple y Netflix.
Elizabeth Taylor protagonizó en 1963 ‘Cleopatra’, que ganó cuatro premios Oscar. El enorme presupuesto de la película casi llevó a 20th Century Fox a la quiebra en ese momento. Sin embargo, se convirtió en la película más taquillera de aquel año, recaudando US$ 57.7 millones en taquilla solo en Estados Unidos y Canadá.