Después de recibir ayuda federal en una de sus empresas, él gasta millones en su mudanza a Indian Creek, en Miami.
Tom Brady, el esposo de Gisele Bündchen, está en medio de una controversia en Florida después de comprar un yate de lujo de US$ 2 millones ahora que se muda con su familia a la exclusiva isla Indian Creek en Miami, tras firmar su millonario contrato con el equipo de fútbol local, Tampa Bay Buccaneers.
Según el diario New York Post, Tom Brady enfrentó una gran reacción negativa debido a la compra millonaria, ya que su empresa, TB12, recibió recientemente un nuevo préstamo del programa federal de protección de cheques de pago (PPP) de US$ 960 mil, que es el apoyo del gobierno estadounidense para ayudar a las pequeñas empresas a sobrevivir durante la pandemia.
El bote de 12 metros, apodado «Viva a Vida» en portugués, en honor a la iniciativa ambiental de Gisele, llegó a San Petersburgo, Florida, y los usuarios de las redes sociales no se callaron, criticando al mariscal de campo de los Buccaneers por gastar tanto dinero después de recibir fondos federales, mientras muchos están luchando como resultado de la crisis financiera que está dejando la covid-19.
Sawyer Hackett, consultor senior de Julián Castro, exsecretario de Vivienda y Desarrollo Urbano de Estados Unidos, fue a Twiter para criticarlo: “La compañía de Tom Brady tomó casi US$ 1 millón en préstamos PPP, mientras que el 52% de las pequeñas empresas que se inscribieron para recibir el apoyo no recibieron ninguna ayuda. Tom Brady vale 200 millones de dólares», se quejó el hombre.
Otro seguidor también le recordó que su esposa brasileña tiene un patrimonio de US$ 400 millones.
«Todos sus artistas, restaurantes y bares favoritos fueron aplastados o destruidos por COVID y la inepta respuesta federal», tuiteó una mujer. «Pero, oye, la empresa de Tom Brady obtuvo un préstamo PPP de US$ 960,855 para seguir comprando aceite de serpiente y camisetas de algodón embarradas con un logo horrible».
Esa compra millonaria se une a una otra compra reciente cuando Brady y Bündchen compraron su nueva mansión en Indian Creek Island por US$ 17 millones.