La cantante ya había externado su miedo de cometer un error con el fin de la tutela…
Britney Spears está libre de cualquier tutela gracias a la resolución de la jueza que llevaba su caso, y a partir de ahora es dueña de su propia nariz.
Pero asesorada por su abogado Mathew Rosengart, la cantante contrató una especie de ‘coach de sobriedad’, o más bien un consejero/observador de conducta, que deberá ayudarla y guiarla en su nuevo capítulo, ahora que ella volverá a administrar su vida.
Spears ya había expresado su temor de cometer algún error cuando lograra su libertad, que podría ponerla en peligro nuevamente, quizá por ello, ella se siente más tranquila con alguien para guiarla.
Una fuente de la revista New Idea asegura que esta persona no le dirá qué hacer, sino que solo le aconsejará en caso de que algo se le atraviese.
«En casi 14 años, esta es la primera vez que ha podido guiarse por sí misma nuevamente … es como un bebé cuando recién comienza a caminar … los padres siempre están cerca para asegurarse de que no se lastime cuando se caiga…», justifica la fuente.
En octubre pasado, a través de una publicación en su Instagram, la artista confesó a sus seguidores que tiene miedo de lo que le pueda pasar después de que termine su tutela. Dijo que teme «muchas cosas», principalmente «cometer un error».
En su arrebato en Instagram, Spears también confesó que principalmente le tiene miedo a los paparazzi, quienes pueden meterla en líos y evocarla a hacer ‘algo loco’.